Descripción

NUESTROS TEJIDOS SON LOS LIBROS QUE LA COLONIA NO PUDO QUEMAR.
El camino del Movimiento Nacional de Tejedoras Mayas de Guatemala

AFEDES
ISBN: 978-9929-752-07-8
Primera Edición, 2020
120 páginas
Tapa Blanda

Sinopsis

El Movimiento Nacional de Tejedoras Mayas de Guatemala nace y camina en un tiempo en que las ideologías capitalista-colonial-patriarcales siguen avanzando insaciablemente sobre nuestros Pueblos procurando mercantilizar la totalidad de nuestra vida. En este contexto de poder, las empresas irrumpen en los rincones de nuestros territorios para apropiarse –además de nuestros cuerpos– de los bienes, las creaciones y los saberes que han sido, por milenios, protegidos de manera colectiva y comunitaria, tal es el caso de los tejidos cuyas autoras somos las mujeres mayas.

Los tejidos mayas son piezas hermosas admiradas en todo el mundo, pero esconden una realidad de despojo múltiple de la vida de sus creadoras: de sus cuerpos, al ser folclorizados para el turismo estatal y privado, y de sus creaciones colectivas, al querer ser patentados. Para la lógica empresarial, los tejidos mayas “son de nadie”, bajo esa premisa buscan privatizarlos individual o corporativamente. Por el contrario, para las comunidades y Pueblos, los saberes colectivos son conocimientos tramados en conjunto; por lo tanto, pertenecen a todas y todos. De ahí que cualquier apropiación individual empresarial representa una forma de despojo, expropiación o robo contra una comunidad o Pueblo.

Como puede verse en estas líneas, el Movimiento de Tejedoras representa una acción anticapitalista, ya que desafía la racionalidad neoliberal depredadora de los Pueblos, y promueve una acción anticolonial y antipatriarcal, pues confronta la mercantilización de la vida de las mujeres mayas y de sus Pueblos. Ante todo, el Movimiento de Tejedoras procura la defensa de la vida y su creación autónoma y cotidiana. Más allá de símbolos y colores, los tejidos mayas son el lenguaje de nuestra relación con el cosmos y de nuestro profundo amor por la vida, son una evidencia de que los Pueblos Mayas seguimos vivos.